PRODUCCIÓN DE CARNE
En un mundo donde la quinta parte de la población humana no tiene alimento suficiente. La dieta excesivamente carnívora de los países ricos es un elemento determinante de los precios internacionales de grano, uno de los principales factores que causan el hambre en el mundo.
(Jorege Riechmann. Reflexiones sobre ecología, ética y dieta. Menos carne, mejor carne, vida para el campo. El Ecologista. 1999)
Eficiencia Energética
Cuando comemos carne de animales criados con productos agrícolas –como soja o maíz– que podríamos consumir directamente perdemos entre el 70 y el 95% de la energía bioquímica de las plantas
(éste no es el caso de los rumiantes criados extensivamente en pastizales, que no compiten por el alimento con los seres humanos: nuestros estómagos no pueden digerir hierba o paja).
Se trata de una especie de “ley de hierro” de la alimentación: cada vez que se sube un escalón en la cadena trófica, se pierden aproximadamente las nueve décimas partes de la biomasa. Por ello, un aprovechamiento eficiente de los recursos alimentarios exige permanecer en la parte baja de la cadena trófica.
(Jorege Riechmann. Reflexiones sobre ecología, ética y dieta. Menos carne, mejor carne, vida para el campo. El Ecologista. 1999)
Se estima que la conversión total es de 3 Kg. de maíz para producir 1 Kg. de cerdo.
Y de 6 kg de grano por kg de pollo.
En EEUU comen 124kg de carne al año. Comen 112 g de proteínas diarias en la dieta, cuando lo recomendable serían 56g (la mitad).
En EEUU se crían 9 bns (9.000 millones) de animales para mantener la producción de proteína animal.
El grano empleado para mantener estos animales daría para alimentar a 840 millones de personas con una dieta vegetariana.
(Pimentel., M & D. Sustainability of meat-based and plant-based diets and the environment. American Journal of Critical Nutrition. 2008 )
OTRA DIETA POSIBLE
"La mitad de la pesca mundial va para alimentar ganado, el 91% del maíz, el 77% de la harina de Soya, el 64% de la cebada, el 68% de la avena y el 99% de las cosechas de sorgo." Datos del departamento de agricultura de los Estados Unidos. 2006
El consejo para la Alimentación Mundial de las NN.UU. ha calculado que dedicar a la alimentación humana entre el 10 y el 15% del grano que se destina al ganado bastaría para llevar las raciones al nivel calórico
adecuado, erradicando el hambre.
(Jorge Riechmann. Un mundo vulnerable. Ensayos sobre ecología, ética y tecnociencia. Comer carne. Nº 10. 2000)
Las vacas europeas se alimentan con el pescado del Perú y la soja de Brasil, mientras en aquellos países latinoamericanos pescadores y campesinos padecen hambre y desnutrición, y nosotros no sabemos qué hacer con los excedentes lácteos.
Como se ve, existe un nexo poderoso –aunque no lineal– entre el hambre y la desnutrición humanas en el planeta y la alimentación excesivamente carnívora de las poblaciones ricas del Norte; y entre ésta última y el deterioro ecológico galopante.
Por ello, no debe sorprender que pasar de una dieta carnívora a una vegetariana suponga reducir fuertemente el impacto ambiental relacionado con las actividades de alimentación. En EEUU se ha calculado el terreno fértil que se necesita para la agricultura convencional mecanizada, con una dieta fuertemente carnívora, y la que se necesita para una forma de vida básicamente vegetariana: son más de 4.000 m2 en el primer caso, frente a menos de 1.000m2 en el segundo. Es decir, la quinta parte de superficie agrícola.
Ninguna pauta de consumo puede considerarse moralmente aceptable si es intrínsecamente imposible de universalizar; si sólo pueden disfrutar de ella una minoría, en tanto la mayoría quede excluida de ella. Sólo los productos que todos los seres humanos pudiesen consumir de manera sustentable, sin dañar al resto de la sociedad ni al medio ambiente, son aceptables para seres humanos preocupados por un “consumo justo”. Pues bien: de acuerdo con esta norma mínima, las dietas altamente cárnicas que prevalecen en los países del Norte no son moralmente aceptables.
En efecto: la dieta corriente en los países del Norte, además de poco saludable, no es generalizable al conjunto del planeta. En 1990, para alimentar a los más de 5.300 millones de habitantes del planeta, se contó con una cosecha de 1.780 millones de toneladas de cereales. Supuesta una distribución igualitaria, con esta cantidad hubiesen podido alimentarse suficientemente 5900 millones de personas; pero con el nivel de consumo percápita de Europa Occidental (especialmente el consumo de carne), sólo 2.900 millones. En el mundo real, sin distribución igualitaria (y con pérdidas del 40% aproximadamente entre la cosecha y el consumo), aproximadamente la quinta parte de la humanidad padece desnutrición y hambre. A mediados de los noventa, 82 estados son incapaces de producir o comprar los alimentos que sus poblaciones necesitan.
Aunque raras veces seamos conscientes de ello, en muchos países el impacto ambiental de la agricultura probablemente sea mayor que el de cualquier otro sector de actividad humana (incluyendo la industria).
(Jorge Riechmann. Un mundo vulnerable. Ensayos sobre ecología, ética y tecnociencia. Comer carne. Nº 10. 2000)
PRODUCCIÓN DE CARNE DE CERDO
España 26 millones de cerdos (6 millones en Cataluña y 5 millones en Aragón. Se incluye extensivo)
España, hemos pasado de matar 25.000.000 cerdos en 1991 a 41.000.000 en 2007.
De 2 millones de toneladas de carne en 1991, a 3,4 en 2007.
Importamos 92.000 toneladas de carne de cerdo en 2007. Exportamos 650.000 toneladas.
Comemos 65 kg de cerdo percápita y año (muy por encima de la media europea de 46 kg).
[Datos MAPA: Anuario de estadística agraria 2007]
IMPORTACIÓN DE GRANO
Como vemos, la ganadería corporativa intensiva en España es el principal devorador de cereales y el principal motor de importación de los mismos. Asimismo es un sector succionador clave de la soja que se produce en Argentina y Brasil en condiciones de monocultivo.
España: 6.300.000 Has dedicadas a producción de grano (cereales).
Producen 19 millones de toneladas.
Gastamos 24 millones en alimentación animal; y 4,6 a alimentación humana.
[Datos MARM: Anuario de estadística agraria 2007]
España importa el 40% de los cereales que utiliza y toda (99.8%) la soja.
Básicamente, para alimentación animal.
La ganadería se come 3 de cada 4 Kg. de cereal consumidos en España.
(VSF. Cultivando el Desastre. 2008)
En algunos cereales como el maíz o la cebada el % de utilización animal, respecto del total, es del 85%. Y el nivel de importación del principal de ellos (el maíz) se eleva al 50%.
Uno de cada dos kg. de maíz que se consumen en España es de importación, y 4 de cada 5 kg. consumidos son para ganadería. (VSF. Cultivando el Desastre. 2008)
¿POR QUÉ SIEMPRE LA SOJA?
El 92 % de la soja importada por España se dedica a los piensos industriales. Por tanto hablar del modelo de la soja en Europa y España significa hablar de ganadería y hablar de consumo de huevos, carne y leche.
España juega un papel importante a nivel mundial por su volumen de importación, 5,5 millones de Tm en
2004.
(¿Y para qué tanta soja? Álvaro Porro y Ferrán García. Observatori del Deute en la Globalització)
El 88% de la soja se destina a la obtención de carne. De esta, el 60% para la producción porcina.
(VSF. Cuando la ganadería española se come el mundo. 2006)
Como ejemplo, solamente para la soja y el maíz que consume la ganadería intensiva española procedente de Argentina y Brasil, utilizamos 3,5 millones de Ha de superficie agraria de estas regiones. Eso es más que toda la superficie de Cataluña. En concreto, España importa el 40% de los cereales que utiliza y toda (99.8%) la soja. El uso de los cereales en España es, básicamente, para alimentación animal.
CONSECUENCIAS DE LA PRODUCCIÓN DE SOJA
Deforestación y pérdida de ecosistemas. En la zona de influencia de la soja existen una gran variedad de ecosistemas únicos que están siendo literalmente eliminados para colocar campos de soja. Yungas, Chaco, Bosque Chiquitano, Bosque Atlántico Brasil, Bosque Amazónico, entre otras están desapareciendo del mapa. Argentina ha perdido el 46% de sus bosques. El ritmo de deforestación se del 10% anual. en Brasil la región sojera por excelencia (Matto Grosso que significa Selva Densa) y considerada la sabana más biodiversa del mundo está casi extinguida. La soja ha llegado también a la selva amazónica dónde se considera la principal causa actual de deforestación.
Contaminación de tierras, aguas, ecosistemas y personas por la masiva utilización de pesticidas y fertilizantes. en Argentina, entre 1994 y 2003 se incrementó el uso de glifosato (herbicida de Monsanto) de 1 a 150 millones de litros. Se han denunciado múltiples casos de intoxicación de los trabajadores rurales y de las comunidades vecinas en todas las zonas productoras de soja. en Brasil la contaminación del agua superficial por plaguicidas pone en peligro a las poblaciones humanas y la vida acuática. Las poblaciones indígenas que
dependen de la pesca como por su subsistencia y de el agua del río como fuente de abastecimiento de agua potable son especialmente vulnerables.
Migración rural-urbana, pérdida de tierras, violencia, hambre, pobreza.
“Vinieron a media noche, nos sacaron a todos de la cama, yo y mis nietos gritábamos. En el camión había muchos niños, golpearon a mi hijo con la culata de un fusil en el pecho para que callara... mis gallinas y cerdos corrían. Desde el camión yo veía humo y pensé que era mi casa pero mi marido me dijo que no, que el humo estaba más lejos. AL llegar a la fiscalía nos enteramos de los dos compañeros muertos....todavía recuerdo a la madre de los chicos, era muy viejita y lloraba, lloraba...” Rafaela relata su vivencia el 24 de junio del 2005 durante el 2º desalojo en la comunidad Tecojoja (Paraguay); comunidad labradora afectada por la
A medida que países con un potencial agrario enorme, con capacidad para alimentar a 2 y 3 veces su población sin ningún problema, destinan cada vez más tierras a la soja por exportación, la pérdida de su soberanía alimentaría acontece la principal causa de hambre y pobreza en estas zonas. en Argentina la disponibilidad de carne y huevos por habitante se ha reducido en los últimos 20 años de manera muy significativa.
(VSF. Cuando la ganadería española se come el mundo. 2006)
TRANSGÉNICOS
Los genes son segmentos de ADN que codifican las proteínas necesarias para el desarrollo y la actividad biológica de todo ser vivo. Cuando se insertan genes extraños en una planta, ésta puede producir un conjunto de proteínas diferentes, originando cambios en las características del fruto o de la planta.
Pero las técnicas de ingeniería genética tienen un amplio margen de error, y el avance de la ciencia ha puesto en evidencia que los genes no funcionan de forma aislada, sino que forman parte de un complejo sistema puesto a punto a lo largo de millones de años de evolución. Debido a ello, la inserción de genes extraños en una planta puede provocar efectos imprevistos no deseados, que pueden pasar desapercibidos, o manifestarse únicamente en situaciones de stress de la planta, suponiendo graves riesgos para la salud y para el medio ambiente.
Cuando se insertan genes extraños en una planta, ésta puede producir proteínas diferentes, originando cambios en las características de la planta o del fruto. Se han transferido genes de bacterias al maíz y a la soja para que produzcan una toxina insecticida y para que resistan a los herbicidas, genes de peces a patatas y fresas para intentar hacerlas más resistentes al frío… Pero la inserción de genes extraños en una planta puede provocar efectos imprevistos no deseados.
Por ello, los transgénicos pueden depararnos desagradables sorpresas.
Los riesgos para la salud de los alimentos transgénicos no han sido evaluados adecuadamente. Su seguridad se basa en ensayos realizados por las empresas que los comercializan, que aseguran que los transgénicos no tienen riesgos, pero no quieren responsabilizarse de sus posibles daños.
Faltan estudios sobre sus consecuencias, a pesar de lo cual se han evidenciado ya efectos preocupantes.
En diversos ensayos de laboratorio se han detectado daños en órganos vitales de ratones alimentados
con transgénicos, trastornos del sistema inmunológico (resistencia a los antibióticos) y pérdida de fertilidad.
Se sabe que la manipulación genética puede estimular la producción de dosis mayores de sustancias tóxicas presentes de forma natural en las plantas y/o la aparición de compuestos nuevos dañinos para la salud. Está demostrado también que puede introducir en los alimentos nuevos compuestos que producen alergias.
Cambios inesperados
Se ha detectado, por ejemplo, que la producción de lignina en las variedades Bt es mayor que en las convencionales, sin que se conozcan los efectos de este cambio de composición en la alimentación animal.6 Tampoco se sabe qué efectos puede tener la variación de la concentración de aminoácidos en la savia del
maíz Bt, ni otras alteraciones de vías metabólicas secundarias no detectadas hasta ahora.
Alergias
Un experimento de una institución pública reveló, por ejemplo, que la proteína transgénica producida por el gen introducido en un guisante (procedente de una judía sin historial de alergias) provocaba una fuerte reacción alérgica en ratones alimentados con este guisante. La composición de la proteína transgénica y de la producida en la judía era prácticamente igual, diferenciándose únicamente en la forma en que se plegaban (el mismo problema que el prión de las vacas locas), por lo que el problema no hubiera sido detectado de no haberse llevado a cabo esta investigación independiente.
Las toxinas Bt contienen segmentos de aminoácidos idénticos a alérgenos conocidos, y su estabilidad sugiere asimismo que pueden ser alergénicas. Se ha demostrado que algunas toxinas Bt no se destruyen por completo durante la digestión y que provocan una respuesta inmunológica en mamíferos, en algunos casos tan potente como la inducida por la toxina del cólera.
Organismos modificados genéticamente no están destinados a acabar con el hambre en el mundo, ni para producir alimentos en zonas degradadas.
MON 810. no se exige seguimiento alguno de los efectos del MON810 sobre la salud, y el único aspecto ambiental contemplado es los efectos sobre la entomofauna y microorganismos del suelo en las parcelas cultivadas con estas variedades.
España es el único país de la Unión Europea que cultiva transgénicos a gran escala y que en
2008 se cultivaron unas 80.000 hectáreas de maíz modificado con genes de bacterias
Dos terceras partes de los alimentos que ingerimos contienen derivados de soja y de maíz.
Consecuencias:
Aparición de malezas resistentes a herbicidas y plagas resistentes a insecticida.
CONTROL CORPORATIVO
Sanidad animal: 10 empresas- 62% mercado mundial
Genética: 1 empresa- 65% mercado huevo marrón y 35% de huevo blanco mundial.
Pienso: 1 empresa el 25% del pienso en España
Semilla: 10 empresas- 31% mundial
Semilla soja transgénica 1 empresa-100% mundial
Pesticidas: 10 empresas- 80% mundial
Grano: 75% de las 5,5 millones de Tm de soja importadas por España sólo una empresa.
Elaboración de alimentos: 10 empresas 37% mundial.
(¿Y para qué tanta soja? Álvaro Porro y Ferrán García. Observatori del Deute en la Globalització)
DESAPARICIÓN DE PEQUEÑOS PRODUCTORES
En el caso de la ganadería de leche que es la menos intensificada e integrada tenemos el cierre del 73% de
las explotaciones en tan sólo 12 años y en los últimos 4 años la explotación media ha crecido un 40%.
Concentración: en España, entre 4 empresas de distribución se reparten el 51.5% de los productos de gran
consumo.
(¿Y para qué tanta soja? Álvaro Porro y Ferrán García. Observatori del Deute en la Globalització)
Datos de internet que están sin confirmar
10 hectáreas sembradas en legumbres alimentan a 61 personas al día,
mientras que las mismas 10 hectáreas con ganado alimentan sólo a dos personas.
Más de la mitad del agua consumida en el mundo se emplea en la ganadería.
Según cifras de la FAO, para alimentar el ganado se utiliza el 95% de la producción mundial de soya y el 44% de la de cereales, es decir, los animales consumen 600 millones de toneladas de cereales anualmente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario